¿Es verdad que la Homeopatía es una medicina cuyos resultados tardan más tiempo en observarse? Ofrecemos a continuación una respuesta a esta interrogante tan común en consulta.
Por: Gustavo Aguilar Velázquez.
Frecuentemente las personas refieren que la Homeopatía puede ser muy buena, pero también que es muy lenta. Ante la insistencia no está de más preguntarse si esto es cierto, y creo que para dar una respuesta satisfactoria tenemos que considerar varias circunstancias.
Lo primero que debemos tomar en cuenta es que no es igual tratar a un síntoma que atender a un paciente, es decir, que no es lo mismo suprimir algún dolor que cambiar a la totalidad de un organismo para que dicho malestar no aparezca más.
Gustavo Aguilar Velázquez.
“En realidad, la velocidad de la curación con Homeopatía será determinada por el organismo del propio paciente”.
Cuando un médico homeópata indica un medicamento no lo prescribe para curar un síntoma, sino que lo indica para que el organismo enfermo genere los cambios necesarios para corregir el problema que está ocasionando la enfermedad. Así, el medicamento homeopático siempre ejercerá su acción por medio del organismo al cual se está tratando, y no directamente sobre la enfermedad.
Esto resulta muy interesante en el sentido de que, en realidad, la velocidad de la curación será determinada por el organismo del propio paciente, de acuerdo a lo que sus diferentes sistemas (nervioso central, endócrino e inmune) tuviesen planeado para llevar a cabo la curación, y no por las condiciones del medicamento.
Por otro lado, cabe aclarar que la medicina homeopática hace una diferenciación entre el tratamiento agudo y el tratamiento crónico o constitucional; el primero se lleva a cabo con medicamentos que inducen respuestas rápidas del organismo, aunque no necesariamente permanentes, que le sirven al médico homeópata para tratar cuadros agudos, en los que la reacción del organismo tiene que ser rápida y definitiva. Aquí son habituales las potencias homeopáticas bajas y repetitivas.
Finalmente, una vez que el paciente ha salido del cuadro agudo se inicia un tratamiento para modificar el patrón de reacción del organismo y los desordenes que en él existen, y que se manifiestan como enfermedad. Así, se establece un tratamiento constitucional con tomas más espaciadas y medicamentos de acción más profunda.
Correo: gav5799@gmail.com
No Comments